La compañía espera alcanzar hasta 2.100 millones de dólares de inversión en 2025, la mayor que ha realizado en el país. Apoyar a las pymes en estos ámbitos es una de las acciones clave que contempla el plan
Juanita Herrera
El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, y el presidente de Microsoft, Brad Smith, anunciaron su intención de colaborar para fortalecer su compromiso con el desarrollo tecnológico y económico del país. Esta iniciativa tiene como objetivo principal impulsar el despliegue de la IA responsable y segura tanto en empresas como en la Administración pública. La compañía espera alcanzar hasta 2.100 millones de dólares de inversión en 2025, la mayor que ha realizado en sus 37 años de presencia en España.
En este sentido, se estima que la expansión de los Centros de Datos de Microsoft en España podrían aportar 8.400 millones de euros al Producto Interno Bruto (PIB) nacional y contribuir a la creación de 69.000 puestos de trabajo para el período 2026-2030, según un análisis de IDC.
La colaboración entre Microsoft y el Gobierno español se enmarca dentro de la Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial y la Estrategia Nacional de Ciberseguridad. En concreto, se articulan en torno a cuatro líneas de acción, la primera de las cuales se centra en la extensión del uso de la IA en la Administración pública para “modernizar los procesos administrativos y proporcionar herramientas y formación a los funcionarios con el fin de aumentar su eficiencia y eficacia”.
Además, Microsoft promocionará el uso de la IA de forma responsable y guías de implementación en colaboración con la Agencia Española de Supervisión de la Inteligencia Artificial (AESIA). El tercer punto será el refuerzo de la ciberseguridad nacional, de modo que la empresa tecnológica colaborará con el Centro Criptológico Nacional del Centro Nacional de Inteligencia (CNI-CCN) para mejorar los mecanismos de alerta temprana y respuesta a incidentes de seguridad informática. La última será la mejora de la ciber-resiliencia de empresas con acciones conjuntas con el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) para optimizar la seguridad de las compañías españolas, especialmente las pymes, las más vulnerables a potenciales amenazas y ciberataques.
El compromiso de esta inversión representa “un paso significativo hacia el desarrollo de una economía digital más segura y ética”, al tiempo que “fortalece la posición de España en la adopción de tecnologías emergentes”.