"Tras invertir 100.000 euros en sus desarrollos de IA y conseguir uno de sus primeros contratos con Prosegur, esta ‘startup’ madrileña ya factura un millón al año y cuenta con sesenta clientes y veinte trabajadores"
Juanita Herrera
Iniciaron sus carreras profesionales en el ámbito de los Recursos Humanos (RRHH). Y su amistad y su anhelo de emprender les llevó, veinte años después, a crear su propia startup relacionada con este campo. Antonio Corral y Jon Gonzalo Torróntegui son los fundadores de Hr Bot Factory, firma que ha optado por innovar dentro de este ámbito utilizando asistentes virtuales con Inteligencia Artificial (IA).
“Nos conocimos por casualidad”, explica Torróntegui. Él había estudiado Ciencias Políticas y Sociología en la Universidad del País Vasco (UPV), mientras que su compañero había cursado Magisterio en la Universidad Complutense y un máster en Recursos Humanos en el Centro de Estudios Garrigues de Madrid. Cuando terminaron su formación, ambos se incorporaron al Grupo Vips entre 1998 y 1999, donde coincidieron, y allí permanecieron ocho años.
Después tomaron caminos profesionales distintos, pero mantuvieron la relación. Hasta que decidieron “lanzarse” a crear su propia empresa, detalla Torróntegui sonriente mientras recorre el campus Google for Startups Madrid, donde Hr Bot Factory se afincó después de la pandemia y cuenta con un espacio de reunión para trabajar de forma híbrida junto a otras 104 firmas emergentes.
El cofundador de la compañía acude a la “oficina” varias veces por semana. Hoy se sienta en una mesa de la cafetería del campus para hacer memoria y recordar los primeros pasos que él y su socio dieron juntos. Antes de definir la idea de negocio, elaboraron un decálogo con los puntos importantes que debía tener el proyecto. Entre ellos estaba su deseo de usar componentes tecnológicos innovadores.
Así, pensaron en desarrollar chatbots para entrevistar a quienes aplican a las ofertas de trabajo de grandes compañías. Y, tras llevar a cabo una investigación de mercado, comprobaron que en España “no existía nada así”.
“Vemos esta tecnología como si fuera Iron Man, una armadura que potencia tus capacidades, no Terminator”
Su sistema de IA analiza el estado anímico del candidato. Y lo hace de una forma llamativa. La persona entrevistada debe grabar un vídeo, en el que responde una pregunta específica para que el asistente extraiga después un frame por cada segundo de imágenes. A partir de estas tomas, “estudia su lenguaje no verbal y sus microgestos” comparándolos con miles de fotos incluidas en su base de datos y, finalmente, traza su valoración.
En un primer momento, lanzaron un chatbot que lleva a cabo las entrevistas en modalidad remota para que, acto seguido, un sistema analice la información obtenida en estas y elabore un rating para cada candidato y determine sus habilidades técnicas y sus soft skills. Tuvo “una buena acogida”, según Torróntegui, y empezaron a comercializarlo en 2019.
NUEVOS DESARROLLOS
Después decidieron adentrarse en los procesos de onboarding (acogida de nuevos trabajadores). Ahí, su tecnología busca una interacción bidireccional, ya que el sistema de IA “conversa con los nuevos empleados para pedirles documentación, realizarles preguntas sobre su llegada a la empresa y responderles sus dudas más importantes a través de procesamiento en un lenguaje natural”.
Pero Hr Bot Factory aún quiso dar un paso más allá y desarrollar una solución que permitiera acompañar a los trabajadores durante toda su carrera en una compañía. El objetivo era atender sus posibles inquietudes sobre nóminas, jornadas laborales, beneficios sociales o vacaciones de forma personalizada: “Este desarrollo tiene un grado de complejidad mayor porque muchas veces las empresas tienen empleados en diferentes situaciones y, por lo tanto, con perfiles organizacionales muy distintos”.
“Con Prosegur hubo un match muy claro entre nuestra solución y su necesidad de automatizar el proceso de reclutamiento”
Hr Bot Factory siempre ha tenido una profunda “obsesión” con que la experiencia de sus servicios sea “lo más humanizada posible”. De modo que su equipo diseñó entes virtuales que no fueran meros avatares, sino fotografías con nombres propios: “Eso muestra mucha más empatía”. Además, la startup trabaja la personalización de sus chatbots para que sean capaces de hablar en un tono coloquial y cercano, así como de mantener small-talk.
Torróntegui asegura que no buscan sustituir a los profesionales de RRHH, sino complementar su trabajo. De hecho, él y su socio ven la tecnología como una aliada que ayuda a potenciar las capacidades, no como una amenaza. “Queremos una buena simbiosis entre el elemento humano y el elemento tecnológico”, defienden.
EN CIFRAS
Actualmente, Hr Bot Factory factura un millón de euros al año, tras haber llevado a cabo una inversión aproximada de 100.000 euros en el desarrollo de la IA; cuenta con sesenta clientes distribuidos en veinte países como España, Brasil, Argentina, Colombia y Chile, entre otros; y su plantilla suma veinte personas.
Su crecimiento le ha llevado a trabajar ya con compañías como Prosegur o el Grupo Dia. “Con Prosegur hubo un match muy claro entre la solución proporcionada y su necesidad de automatización del proceso de reclutamiento”, remata el socio de la Hr Bot Factory.